Del
1 al 10
tan complejo como complicado,
en un mundo de 1000 costados,
voy rellenando huecos vacíos,
con tripas empapadas de sentíos...
sin nada que perder pero parece,
que sangro el infinito que carece,
de ilimitadas líneas que continuar,
como leer un karaoke miedoso a cantar...
roto en 2 a veces y reunir las piezas,
lo que se merece al chocar la cabeza,
en una pared dura como la piedra,
el dolor perdura como la mala hierba.
pero cambiando de tema,
es algo que me quema,
y por dentro me desquicio,
al no encontrar mi sitio...
me pregunto y pregunto porqué es así,
sin que la respuesta venga hasta aquí...
es como llamar a tu perro desde lejos,
y que se haya perdido a su regreso.
aunque por mucho que te preocupes,
desde el lugar que ahora él ocupe,
resguardado del frío y prudente,
aparecerá pronto de modo inocente.
como escribir una estrofa y qué decir...
me revuelco en la charca del jardín,
como un cerdo pasando el tiempo,
arropándome de mi íntimo momento...
resulta tan reconfortante escupir,
pensamientos sin poder discernir,
si la próxima parada será incierta,
o si un caro peaje antes me despierta...
dando pasos en zancos arriba muy alto,
desde donde ver curioso lo que se mueve,
cada vez que alguien habla me callo,
y escucho al viernes criticar al jueves.
como descifrar que del 1 al 10,
hay pasos adelante y del revés,
que hay más de lo que se esconde,
entre números sin saber adonde...